Aunque tengo unas cuantas "manoletinas" , "bailarinas" , "francesitas", (que cada uno llama de una forma, para referirse a lo mismo), porque ahora se llevan mucho; quería comprar unas para adaptarlas al vestido imperio, pues las que uso normalmente, o son de colores que no encajaban, o las blancas, las pongo mucho , y las llevo muy comoda y no queria dejarlas para recreación.
Los zapatos que encontraba en fotografías de museos, litografías, etc, de esa época podian ser de dos tipos, con puntera o redondeados. Decidí hacer los redondeados, pues me resultaría más fácil encontrarlos ya que están de moda.
1790-1800 los primeros y 1799-1805 los segundos
1800-1810 las de arriba y 1800-1815 las de abajo. Se podrian poner ahora mismo y pasar por actuales ¿No creen?
Así que bajé temprano a un mercadillo que ponen los domingos cerca de mi casa, y encontré las que les muestro al final del todo, muy baratas. Evidentemente no son de piel. Pero hacen el papel, y por 2 euros ¡Que se va a pedir ¡ .
Así que cogí los mios, les añadí una pasamaneria dorada y un lazo ...y aquí están.
En este caso el refrán se hizo realidad literalmente : Al que madruga Dios le ayuda. En el rato que busqué mi número desaparecieron todos los zapatos de este tipo.
Compré tres pares, para teñirlas o simplemente guardarlas para otros modelos del futuro. No son para poner a diario, pues al ser plástico estropean los pies , pero para unas horas....
No se si cambiar loa cintas al medio del zapato en vez de ponerlas atrás . Son dos puntadas y estoy a tiempo ¿Qué opinan?
Al que madruga Dios le ayuda.
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